Santo Domingo.-En pleno 2023, República Dominicana cuenta con mujeres en altos mandos como la vicepresidenta Raquel Peña, o la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía, además de decenas de féminas al frente de compañías como María Clara Alvárez Hurtado, (Banesco Banco Múltiple) o Mercedes Ramos (Grupo Ramos), costaría creer que hay disparidad entre empleados de empresas dependiendo quien lidere.
Sin embargo, se trata de una realidad aun latente. De acuerdo con un reciente informe de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), las empresas lideradas por hombres no solo concentran más del 87% de todos los empleados, sino que la diferencia de género entre esos colaboradores se duplica. Mientras los empleados masculinos (en empresas de hombres) son de 61%, las femeninas representan el 38% en dichas empresas.
Por el contrario, y tal como detalla el reporte, las empresas con una mujer al mando tienen una composición del empleo más paritaria. “En este grupo de empresas el porcentaje de empleados hombres es de 50.1%, mientras que el de las mujeres es de 49.9%”, detallan.
El informe explica que este comportamiento, en parte, es influenciado por los sectores económicos que lideran las mujeres, principalmente las actividades dedicadas a servicios (enseñanza, salud, profesionales, alojamiento y servicio de comidas), que a su vez es donde se emplean más mujeres por las características propias de los puestos ocupados.
Por su parte, los hombres tienen una alta participación liderando empresas dedicadas a la industria, minas, agropecuaria, construcción, entre otras, que son las que utilizan más intensamente mano de obra masculina.
Es así como se observa mayor presencia de mujeres, tanto en el empleo como en las posiciones de autoridad en las actividades dedicadas servicios, con algunas excepciones, como sucede en el sector de actividades artísticas, de entretenimiento y recreativas, donde las mujeres representan el 80.6% del empleo, sin embargo, solo el 14.8% de las empresas son lideradas por una mujer.
Otras actividades donde se muestra una diferencia porcentual notable son las actividades económicas dedicadas a la información y comunicaciones, donde el 90% está liderada por hombres, y apenas el 37% del personal son mujeres. Cifras similares muestra el comercio, donde los hombres lideran en el 81% de los casos, y ese género representa el 65% de los colaboradores.
Asimismo, están las empresas de labores administrativas y servicios de apoyo, en las cuales el 73% son lideradas por hombres y el personal masculino asciende al 70%. Aun así, hay excepciones. En el caso de las actividades financieras y de seguro, le porcentaje de empleadas es de 53%, con un 78% las compañías lideradas por hombres.
En los restantes tipos de establecimientos, los porcentajes de asalariadas no superan el 45%, frente al género masculino. Por su parte, (a excepción de enseñanzas, servicios sociales, y salud), las empresas de los demás sectores liderados por hombres no son menor al 75%.
Aun así, desde al ONE hacen la aclaración de que estos resultados “no necesariamente explican una relación entre la participación de las mujeres en el empleo con el sexo de quien preside la empresa”, pero si evidencia en parte, que la participación de las mujeres en el empleo como en posiciones de autoridad está relacionada con la actividad económica.
Tomado de: https://eldinero.com.do/Por Joan Sebastian Vallejo