Aumentan las quejas de los residentes de Prado Oriental, Urbanización Los Maestros y Las Cayenas, en avenida coronel Rafael Tomás Fernández Domínguez; San Isidro Labrador en la Hípica y Cayenas del Este en la Freddy Beras Goico, dicen «no aguanta más».
Santo Domingo Este. -Dirigentes comunitarios, representantes de Juntas de Vecinos y miembros de diferentes sectores de la comunidad, así como de los residenciales Prado Oriental, Urbanización Los Maestros y Las Cayenas, localizados en la avenida coronel Rafael Tomás Fernández Domínguez; el San Isidro Labrador en la Hípica y Cayenas del Este en la Freddy Beras Goico, que inicia frente a la entrada de la Fuerza Aérea Dominicana, en San Isidro, han elevado su voz ante el alarmante incremento de hechos delictivos en la zona, señalando la ausencia de medidas efectivas por parte de las autoridades policiales y municipales.
Según denuncias recogidas por colaboradores de este medio, los actos delictivos se han multiplicado en los últimos meses, afectando la tranquilidad de familias trabajadoras que hoy viven con temor. “Ya no se puede salir después de las 6 de la tarde con el sol afuera. A una vecina le arrebataron el celular a plena luz del día justo frente al portón principal”, relató Maritza Pérez, madre de dos hijos y residente desde hace varios meses en el nuevo proyecto residencial Las Cayenas del Este a solo 70 metros de la entrada de la Fuerza Aérea.
De igual manera, el señor Domingo Ramírez, otro afectado, afirmó que fue víctima de un atraco mientras regresaba del trabajo: “Me encañonaron dos motoristas justo en la entrada de la urbanización. Se llevaron mi mochila, dinero y el celular. Llamamos a la Policía y nunca llegaron”.
Dirigentes de la comunidad consideran inaceptable la respuesta de las autoridades, calificándola de “insuficiente y peligrosa”. Actualmente, solo se cuenta con dos o tres agentes para cubrir una zona amplia, quienes además carecen de vehículos para patrullar de manera efectiva o nunca tienen combustible,
La situación se agrava mucho más cuando se observan patrones similares en sectores cercanos como Prado Oriental, Las Cayenas, Urbanización Los Maestros, San Isidro Labrador, San Isidro y San Luis, donde también se han reportado asaltos a mano armada, robos a negocios y despojos de motores a deliveris que circulan en la zona, así como, locales y atracos en paradas de transporte público. En uno de los casos más recientes, ocurrido en la avenida Hípica, un colmado fue asaltado por encapuchados en horas de la tarde, sin que hasta la fecha se haya identificado a los responsables y uno de los empleados fue amenazado de muerte.
La comunidad hace un llamado urgente al Ministerio de Interior y Policía, la Dirección Regional de la Policía Nacional de Invivienda, y a la Alcaldía de Santo Domingo Este, exigiendo medidas inmediatas como patrullajes constantes, la dotación de más agentes, y equipos básicos para combatir la ola de criminalidad.
“¿Cómo esperan que se garantice la seguridad si los propios agentes policiales nos dicen que no tienen nada, ni combustible ni radios para comunicarse?”, cuestionó la presidenta de una de las juntas de vecinos del lugar.
Algunos residentes coinciden en señalar que la ola de atracos, robos y asaltos se ha venido incrementando los días en que se llevan a cabo juegos de apuestas en una gallera cercana al residencial Las Cayenas del Este en la Freddy Beras Goico.
«Me parece que eso pasa porque del otro lado (al frente) hay una gallera y puede ser que cuando los apostadores pierden, salen en motores, algunos encapuchados, a buscar a quien atracar para volver a jugar al mismo lugar, eso es fácil de darle seguimiento», dijo un vecino que no quiso ofrecer su nombre.
Pidieron al director de la Policía Nacional, Ramón Antonio Guzmán Peralta, que ordene un mayor patrullaje en los alrededores de los residenciales afectados, debido a que temen que, de no tomarse acciones concretas, la situación se salga de control y ocasione consecuencias mayores. «La inseguridad no solo está afectando la calidad de vida, sino también el desarrollo económico y social del sector que va viento en popa», expresó un abogado de Cayenas del Este.
